Vampiros

Dicen que los vampiros no existen. Yo creo que sí, solo que han ido cambiando al paso del tiempo, se han modernizado. Ahora en lugar de chupar sangre lo que hacen es quitarte tu energía, tu esencia, se alimentan de ti (como siempre) pero de otra forma, de manera tan sutil que no te das cuenta.

¡Por supuesto! Son encantadores, fascinantes, misteriosos y mucha gente siente hacía ellos una atracción irresistible. Al principio son gentiles, amables y generosos, una vez que han logrado apoderarse de tus pensamientos, de tus deseos, anhelos e ilusiones ¡no tienes escapatoria! Vives solo por ellos y para ellos, te olvidas de ti y todo lo que hay a tu alrededor, pendiente de sus más pequeños gustos, necesidades, alegrías o tristezas.

La manera en que se apoderan de tu energía puede ser a través del sueño, mientras duermes es más fácil apoderarse de ti y tus más recónditos pensamientos, otra es en el sexo porque es cuando todos nuestros sentidos están absolutamente alertas y es más fácil absorberla, además son excelentes amantes.

Al principio no lo notas, piensas que es solo lo normal. Solo al paso del tiempo cuando te das cuenta que siempre, siempre estás cansada. Ya no tienes interés en nada, vas perdiendo poco a poco a tus amigos, dejas de ver a la gente que frecuentabas, no tienes aspiraciones, anhelos, esperanza o fe. Sabes que estás cayendo a un profundo abismo pero sigues ahí, no puedes dejarlo. Es una mezcla de dolor y rechazo, amor y odio, placer y dicha, llanto y tristeza.

Eres y no eres, estás y no estás ¿Cómo es esto?

Tu cuerpo esta ahí, estás ahí pero tu energía, tu esencia ya no está. Te cuesta trabajo levantarte, ir a la universidad, solo despertar representa un gran esfuerzo, quisieras dormir, dormir y nunca despertar.Pero no morirás, algún día cuando despiertes ya no tendrás más energía que dar, entonces el vampiro encantador se irá para siempre porque te ha dejado vacía, seca, se ha llevado todo de ti, no conseguirás encontrar paz, alegría, bienestar, ese es su deseo y su finalidad, que siempre lo ames aún cuando sabes que te destruyó.